La “Dama de la Danza Trujillana” Auris Berrios recibió el Premio “Mujer Encantadora” 2023
Prensa Gobierno Bolivariano/Incaet.
Griselda Castellanos.-
Recientemente se celebró en Valera la ceremonia de entrega del Premio “Mujer Encantadora”, en su décima primera edición, iniciativa impulsada por el periodista Xavier Bencomo y que en esta oportunidad reconoció la trayectoria de la profesora Auris Berrios, actualmente al frente del Centro Integral de las Artes de Valera (CIAV), adscrito al Instituto de la Cultura y las Artes del estado Trujillo (Incaet).
Auris Berrios, “la Dama de la Danza Trujillana”, es conocida por su gran pasión por el baile, por su tenacidad y por salirle al paso a las adversidades en su trasegar diario y en su inquebrantable labor formativa, artística y cultural.
Con tan sólo ocho años de edad comenzó en las filas de la Escuela de Danza y Ballet “Gladys Mota”, de la mano de su gran maestra, profesora Gladys Mota, quien partió muy joven de este mundo, dejando un importante legado que se mantiene vivo por las muestras de amor y de respeto de la profesora Berrios, quien ha permanecido al frente a ésta institución, como su Directora, por 40 años ininterrumpidos, elevándola a Patrimonio Cultural en el año 2009 y Orden Ciudad de Valera desde el 2012.
De su trabajo infatigable, desinteresado y comprometido habla la formación de cientos y cientos de niñas y jóvenes, muchas de las cuales aún hacen, o han hecho, parte de la institución como bailarinas e instructoras, o dentro de las filas del Taller de “Danzas Valera”, fundado por ella misma en el año 1981, junto a su partenaire, Jesús Durán, bajo el lema "El espíritu de la naturaleza es la danza de nuestros corazones".
Tanto la Escuela de Danza y Ballet “Gladys Mota” y el Taller de “Danzas Valera” dijeron presente durante la premiación, llevada a cabo en el Club Italven, con un montaje de joropo titulado “Del Llano a los Andes” y un pajarillo, programación cultural enmarcada en el Día Nacional del Joropo a que se celebra en todo el país el 15 de marzo.
Trascendencia
En su afán de prepararse académicamente viajó a los Estados Unidos, donde adquirió conocimientos y técnicas que transmite en sus clases y se reflejan sobre el escenario; en cada movimiento, en la elegancia del vestuario y en la música escogida. No hay rincón del estado Trujillo que no conozca la calidad del trabajo de Auris Berrios; quien entrega alma, vida y corazón en cada presentación, dando cuenta de un enorme profesionalismo y distinción, que le han valido el respeto de todo el gremio dancístico.
Su constancia la traslada al ámbito familiar, con un matrimonio estable de más de 30 años; madre virtuosa, se abocó a la crianza de su única hija Auryvel, quien la acompañó por muchos años en la institución como alumna destacada y quien hace 13 años la convirtió en abuela, siendo junto a su nieto Alessandro y su yerno Giussepe Roiatti, grandes motivos de felicidad para ella.
Junto a su esposo, el señor Wilmer Villareal, ha levantado una hermosa familia; ejemplo de consideración, amor, paciencia y trabajo en equipo. Extraordinaria profesional y mejor esposa, madre, abuela, hija y hermana. Además de amiga incondicional, fe de ellos son los más de 50 años que la unen a la profesora Yelitza Barrera, comadre, hermana de la vida y su mano derecha en el día a día; en cada proyecto y en cada nuevo reto que asumen con gran determinación.
Retos
Actualmente; frente al Centro Integral de las Artes del municipio Valera (CIAV), que abarca la dirección de la Escuela de Música “Laudelino Mejías”, es referente de la enseñanza de las bellas artes en la región, proyecto que ha sabido consolidar, impulsar y proyectar a punta de esfuerzo, disciplina, trabajo y sacrificios, avanzando en un hermoso proceso de inclusión donde son atenido diariamente más de 200 pequeños, muchos de ellos con capacidades especiales, quienes son recibidos con los brazos abiertos.
Sin duda alguna; la profesora Auris Berrios es sinónimo de éxito garantizado por la seriedad con la que asume cada nuevo reto. Respetuosa, formal, considerada, cortés, son algunos de los calificativos que podrían definirla y la distinguen como ser humano. Merecedora de todo los premios y condecoraciones que ha recibido en sus cincuenta años de carrera artística, el pueblo trujillano tiene en ella un gran baluarte, y será recordada por las huellas que ha ido dejando en la vida y en el corazón de quienes han tenido la fortuna de conocerla como maestra, familia y amiga.
